sábado, diciembre 22, 2012

Y cómo se explica

Puedo decir que sus besos son la calma
Y que la distancia quema mi corazón lentamente.
A veces todo se resume a un espacio y un instante.
Al calor entrante por la ventana que se mezcla con tu cuerpo y el mio
A la lluvia torrecial por la que caminamos felices y libres.

Todo está dividido.
Y vivo a veces en el extremo donde todo es intenso, donde todo es impulso.
Mientras anhelo la dulzuta, la calma, el entendimiento.
Y entonces me arranco a la paz, donde inunda la complicidad creada con los años
Mientras extraño la calidez de cada caricia incendiaria.

Y veo entonces, que ni aquí ni allí, que de una u otra forma siempre existirá un espacio sin llenar.
Que a mi cuerpo le faltará su molde, que a mi alma le faltará su compañero.

sábado, diciembre 15, 2012

Debilidad

Me gustan las certezas, me gusta saberlo todo, me gusta entender cada mínimo detalle de lo que ocurre.
Me descoloca la inestabilidad, el descontrol, el cómo cada parte se desvanece en mis manos.
Y cómo cada barrera, cada excusa, es despojada.

Y ahí estaba yo, tan segura, tan firme, tan convencida y orgullosa de hacer lo correcto.
Y después estaba la parte de mí, que pareciera disfrutar completamente el error de cada día.

A veces la debilidad no es tan terrible
A veces es mejor ceder.
Y me pregunto qué mas es sino debilidad, y me pregunto si debería seguir cuestionándomelo.

Me pregunto si no debería simplemente disfrutar de los momentos donde pierdo toda mi fuerza de voluntad

sábado, diciembre 08, 2012

Que teníamos...

...que tomar aire de lo que nos aprisionaba
...que elegir un camino definitivo
...que recorrer la soledad completa, y aprender a amarla.
...que ver que quizá aun queda.
...que quizá apenas nace.
...que matar lo banal y permitir lo profundo.
...que descubrir los detalles, adorar los detalles
...que conjugar las diferencias, amar las fallas.
...que aprender a equivocarnos, y corregirlo erróneamente.
...que dejar de huir, para poder descansar.
...que decir adiós, para comenzar el camino
...que perdernos, para encontrarnos realmente.

miércoles, noviembre 28, 2012

Volver al origen

Las palabras salidas de mis lápices decorados, entintando mis libretas coloridas
Son ahora el goce y las mariposas.
Son el incanzable fuego, alcanzándome
Son la intensidad que ya no existe entre tus brazos.

Nunca el término había dado paso a un regreso tan entrañable.

sábado, septiembre 08, 2012

Y nada más que la verdad

¿Qué es lo justo ahora?
Pedí tanto tiempo, traté tanto tiempo, deseé tanto tiempo estar aquí, así.
Necesitaba tanto quitarme todas esas sombras persiguiéndome y no dejándome tener mi vida en paz.

Y lo logré.

Me agrada pensar ahora que después de todos los porrazos, de todo el mundo encima que se me vino luego de aquel tiempo, salí.

No me agrada pensar que en todo ese tiempo sin salir, fui todo lo que me molesta, todo lo malo que podía salir de mi, todo lo que quisiera no volver a ser. Y espero nunca caerme así otra vez. Aunque si lo hiciera, sé que voy a salir de nuevo.

Durante toda mi vida he metido la pata por mi forma de ser, específicamente por una gran cualidad (o defecto a ratos), decir las cosas.

Tengo la honestidad demasiado en un pedestal, como la gran cualidad que todo el mundo debería tener, que debería respetar, y profesar si desea realmente tener relaciones humanas verdaderas. Nadie puede vivir en una amistad, una familia, una relación de pareja, en que la honestidad no funciona. Es enfermo, es desgastante, y es poco puro.

Y toda la vida, también, he puesto en un altar a la gente que quiero. Probablemente ninguno de ellos se haya dado cuenta, porque es raro que tenga un gesto de alabar a alguien.

Una vez alguien me preguntó porqué no me importaba lo que la gente dijera u opinara de mí, y todo se reducía a que la gente que no me importa, puede pensar lo que quiera y eso no cambia quien soy. Y porque tengo la fé ciega que si alguien me quiere ( y yo le quiero) y me conoce, le importo, etc, jamás creería algo malo de mi, alguna historia inventada, o alguna mala opinión, sin revisar en lo que por experiencia saben. Y de sospechar algo, primero lo hablarían conmigo. De nuevo, porque la franqueza es demasiado importante para mi.

Obvio que la gente que me conoce sabe que tengo miles de fallas, que soy buena para decir cosas super duras, porque me cuesta filtrar lo que pienso. Saben también que nunca haría algo por hacerles daño y que si de pronto les mando un discurso medio feito, es porque no supe cómo hacerlo lindo y necesitaba urgentemente hacerles saber lo que pensaba de alguna situación. Y como muchas de las personas que quiero son medio sensibles (niñitos (as) llorones), ahí si me mando las grandes metidas de pata.

Últimamente me he cuestionado mucho eso, el cómo ponerme un filtro, porque a veces siento que he roto cosas demasiado preciadas para mi por ser como soy. Pero entonces recuerdo que en la época que me lo guardé todo, y no dije absolutamente nada de lo que pensaba, me fui a toda la porquería de vida que llevé en ese tiempo, y no quiero eso para mi nunca más.

He conocido muchas personas que son amorosas y le caen bien a todo el mundo, que les alaban constantemente y luego han sido los primeros en descuerarlos por detrás. Entonces, ¿sirve mas ser así porque le caes bien a todo el mundo? ¿Sirve mas porque tienes la posibilidad de ocuparlo para ser una porquería sin que nadie te lo reclame?

Yo creo que no.

No vale la pena alimentarse de tu propio veneno, no vale la pena gastarte en ser una cosa que no eres. Si eres una mierda, se sincera sobre ello al menos.

Yo no creo que sea una mierda, tampoco soy la mejor persona del mundo, obviamente. Pero las malas épocas me han dejado demasiado llena de lecciones que de pronto comenzaron a tener sentido y a ser prácticas a mi vida.

- Si tengo algo que decir lo digo, intento hacerlo de buena forma, pero generalmente sale torpe y al explicarlo queda peor. Si pienso que alguien tiene algo malo, se lo digo, o evito simplemente andar haciéndome la simpática con esa persona, es un gasto innecesario de energía.

- Todo el mundo tiene días malos, y cuando me toca uno así, por mas que me cueste, intento no dejarme llevar por cosas amargas y recuerdo que nada sacaré con ponerme negativa, que lo mejor es buscar las soluciones. O simplemente ponerse a llorar como enferma hasta sacarlo todo del sistema. Uno siempre vuelve a estar bien. O no sé, al menos yo tengo la convicción firme que pase lo que pase, no hay nada que con voluntar no pueda superar.

- Comencé a dejar de odiar todo sobre mi, y comencé a tomar una actitud mas cariñosita hacia mi persona. Uno no puede mejorar su relación con el mundo si no empieza a sacarse sus propios rollos personales. Hay que entender que uno no es perfecto, que a veces la gente te saca tus defectos a la luz no por pesados, si no porque quieren ayudarte a mejorar. Y creo que es un gran error de muchas personas que creen que están en un nivel de madurez, bondad, sensatez, mucho mas elevado que el resto. Todos tenemos nuestros momentos de idiotez, hay que asumirlo.

- Quizá me volví mas defensora de la gente que quiero, antes era como mas piolita, actualmente creo que podría sacarle la cresta a alguien si le hace daño a una persona que quiero. Pero tengo que aprender a tomar distancia, a no tomarme todo personal, porque aun adorando a alguien, esa persona tiene sus propias decisiones que tomar y su propia forma de enfrentar los asuntos que le están pasando.

- Dejé de sentirme mal porque a veces no encontraba en quien apoyarme. No porque uno esté ahí para alguien, esa persona lo estará de vuelta. Quizá muchas veces yo no he estado ahí para personas que si lo estuvieron para mi, y lo siento mucho. Al final entendí que la única fuerza que debo tener firme es la mía, no esperar la del resto, pero cuando llega si tomarla como una muestra de cariño, y de que los lazos permanecen.

- Hay personas en este mundo que simplemente nacieron atrayendo al resto, que todo el mundo está siempre pendientes de ellos y cada cosa que dicen y hacen. Es como, por ejemplo, personas que nacen con el don de que cada estado o foto que ponen en facebook, todo el mundo se lo comenta y le dan like (qué ejemplo mas malo). Y existimos otras personas que no, que podríamos tirar todos nuestros dramas en facebook (siguiendo con mi pésimo ejemplo), y a nadie le importaría siquiera leerlo. Y pucha, no nací carismática, nací bastante esquiva, directa y con retazos de ternura que solo me alcanzan para declararle mi amor eterno a mi hermanito chico. Al menos actualmente es así. Entonces, ¿para qué pretender que a todo el mundo le interesará cada parte de mi vida? Probablemente muchos solo lo hagan cuando esté en modo llamativo por alguna cosa random.

- Me di cuenta hace mas o menos un mes de lo mucho que extrañaba la ternura en mi vida. Debido a mi periodo de mierda (porque no hay otra forma de definirlo), me puse demasiado esquiva y ruda, no tanto como ruda quizá. Pero la época donde todo para mi era dulzura se volvió molesta, y me desagradó ser así. Pero entonces recordé que tenía sus partes buenas, y he comenzado a atesorarlas de vuelta, no esperando que sea todo color de rosa, pero si asumiendo que a veces es importante no olvidar la suavidad de la vida.

- Empecé a estar feliz constantemente, y todo el tiempo pensaba que era una falsa felicidad, porque uno no puede ser feliz sin motivo. Pero entonces, ¿cómo uno a veces está triste sin motivo? Enojada sin motivos, deprimida sin motivo. Entonces decidí que si teníamos derecho a tener sensaciones negativas sin motivos, iba a aceptar que era feliz porque sí, punto. Y tampoco es que ¡oh, qué feliz soy! pero me agarré firme de esa actitud porque era la única forma de seguir, pase lo que pase. Y últimamente las cosas han estado realmente duras, a veces dolorosas, pero si uno no parte de una base feliz, será peor.
Y tengo la sensación de que a muchas personas les pasa lo mismo que a mi sobre ese "estar feliz", que quizá lo sienten falso de mi parte o algo así. Y bueno, quizá no me conocen tan bien, quizá están demasiado lejos ahora.

- Me encantaría poder ver a toda la gente que quiero feliz, obvio, tampoco soy tan llena de virtudes como para decir que quiero la felicidad de todos y la paz mundial. Karma is a bitch, y hay personas que simplemente obtienen lo que merecen. Cosechas lo que siembras, dice el dicho, creo, siempre los olvido.
El asunto con ver feliz a quienes quiero, y querer resolverle sus problemas, es que me meto demasiado! soy demasiado intrusa, con buenos fines, pero los buenos fines no son suficiente razón para meterme donde nadie me llama. Aunque a veces si me llaman.
Y ahí de nuevo, ¿debería decir todo lo que pienso? ¿Debería quizá callarme alguna vez? Yo creo que sí, porque cada persona tiene sus procesos y sus tiempos, algunos los considero algo idiotas y egoistas. Pero todos en cierta forma y medida somos egoistas y vemos las cosas solo como nosotros queremos verlas.

Quisiera encontrar la forma perfecta de hacer las cosas encajar, y hacer siempre lo correcto, pero tampoco quiero asumir que de los errores se aprende, y cometer muchos errores solo por eso. Pero supongo que así como he ido de a poco encontrando mi propio equilibrio sobre cosas que antes me quemaban la cabeza, iré acomodandome a esto. La vida es demasiado valiosa ahora para mi, como para permitirme meter la pata todo el tiempo, solo porque tengo niveles desmedidos de decir las cosas.


Por otro lado, amo a quienes son capaces de aguantarse todo lo que les digo, pero que también tienen la seguridad que pueden decirme lo que quieran con todo el derecho del mundo. Es para mi la perfección.

lunes, junio 04, 2012

Y lo que no debería

Había esa extraña sensación de calma
de pronto todo lo que era tontería se volvió alivio
de pronto todo lo que era impulso pasó a ser dulce

No sé cómo se diferencia en la sutil línea en la que siempre estamos pisando
y las preguntas obvias parecieran nunca tener respuesta
y la sensación de tener el control de todo se escapa de las manos
a ratos...

No hay parte de mí que, en ese momento, no aflorara completamente.
En la parte de ti que no quería ver existir.
Y que ahora no sé qué hacer con esto.



miércoles, mayo 23, 2012

And there was the end

Los finales de serie...

Los finales de serie son....uhmm como la muerte y posteridad de algo que seguiste por años. O los amas o los odias, aunque generalmente el "odio" es mas bien un estado de cara de póquer cuando comienzan los créditos y te das cuenta que acabó y no tuviste la reacción que merece un final de serie.

Quizá hay un efecto similar en los finales de temporada, pero no en las proporciones del final de serie, a menos que cancelen la serie (como V, descanza en paz.), entonces te das cuenta que te involucraste demasiado en una historia, otra vez, y ahí la historia terminó, y tu vida sigue, sin la serie. Y entonces piensas ¡qué carajos hago ahora sin ver mi serie!

Buscarte otra. Debes buscarte un nuevo amor, o varios. A veces uno no basta para llenar tus necesidad.
Sigo hablando de series =)


No es que haya visto muchas series completas, o que haya seguido muchas series por años, pero si les he sido fiel, no he abandonado ninguna. Soy una niña buena.

Además siempre he sido una persona mas de series que de películas. Qué mala casi licenciada de cine soy.

Generalmente comienzo a ver series por culpa de alguien, o porque las han dado en canales nacionales y luego las busco en sus idiomas originales y con todas sus temporadas.

Primero fue Smallville. Porque no vale la pena recordar pedazos de series que vi mas niña, como Melrose Place, o Beverly Hills, que obviamente son series muy adecuadas para que las vea una niña. Podría mencionar las series infantiles, como Sabrina, o Clarissa, o la serie de Sclub 7, o Clueless...o tantas cosas de esos tiempos donde los canales infantiles daban cosas divertidas.

Pero volvamos a Smallville. Mi primo mayor me la pegó, un día de visita en su casa, él como buen fanático de cómics, me dio discurso sobre lo que trataba y sobre Superman y tantas cosas que no recuerdo (o que fingí que escuchaba mientras miraba a Tom Welling en la pantalla y babeaba). Pero me interesó la serie, quizá por eso del cambio de etapas, porque durantes las 10 temporadas de Smallville, Clark creció, justo en el tiempo en que yo estaba creciendo. Y bueno, él se tranformó en superhéroe, yo solo....tengo mas años.

Siempre veía situaciones identificables en los capítulos, relaciones que hacían similitudes y me hacían sentido, aunque lamentablemente cayó en el mal de querer alargar. Smallville debió terminar en la temporada 5 o 6, luego fue demasiado, relleno innecesario, perder lo campesino de la serie, cambiar demasiado el plot original. Pero aun así la seguí, porque nunca dejo tirada una serie, me da pena, no quiero herir sus sentimientos.

Para la décima temprada estaba harta, pero seguí hasta el capítulo final de 2 horas. Fue emocionante, porque contenía mucho de la mitología de Superman, la que con los años había ido conociendo, pero como serie, había algo que no cuajó. Y no me llenó como final de serie, había algo que se había perdido de lo que solía ser, aunque quedé contenta con cierres de personajes, creo que dejaron cabos atados, y los obvios si atar, aunque algunas cosas me parecieron forzadas, como matar a Tess porque les sobraba. Eso sí, me sorprendió que dejaran a Chloe, porque al ser un personaje no perteneciente a los cómics, siempre se creyó que ella moriría, ¡pero no! y jugó un papel genial, cada uno de esos 10 años. Sin duda lo mejor de Smallville, fue agregar ese personaje a la historia.

Algo imperdonable: No pueden ser tan vagos de no haberle hecho el traje a Tom Welling y haberlo hecho ponérselo para el último cuadro donde él se abre la camisa para "transformarse" en Superman. Fue tan evidentemente hecho en post.

He visto en realidad, ahora que lo pienso, no tantas series completas.

Vi Sex and the city, pero digamos que no es algo tan grande en mi vida, aunque si algo que se te queda pegado. Y no es que me importe mucho su final, porque siempre odié a su protagonista. Pero también es cierto que por mucho que un hombre sea un idiota, uno es mas idiota de volver una y otra vez allí. Me han contado.

Prison Break.

No es la clase de serie que una dulce y tierna niña como yo ve....¡mentira! La amé desde el primer capítulo. Esta fue por culpa de mi primo menor, y seguí cada parte de ella porque la encontraba brillante, me parecía que la forma que tenían de jugar con la tensión del expectador era buenísima. Y pasé tiempo histérica pensando que todo saldría mal, aunque muchas veces salió mal. Pero no era una serie predecible, para nada. Y menos aun rutinaria, cada capítulo era tanto que no podías si no querer mas.

Pero esa sí la dejé botada en algún momento, perdóname Michael Scofield que estás en los cielos.

La retomé como dos años después, cuando ya había terminado, como buena viciosa que soy, la bajé entera. Y la vi completa de nuevo, no es que sea mucho, son solo 4 temporadas, un acierto sobre saber en cuanto contar una historia sin arruinarla solo por seguir al aire.

No pude si no enamorarme del protagonista, porque era perfecto, y soy una persona muy cursi que ama a personajes de ficción.  De acuerdo, tenía sus cosas no tan buenas, pero era casi perfecto. Obviamente nunca encontraré un Michael Scofield en la realidad. Lástima, me casaría con él.

Y si algo fue terrible de esa serie, fue verlo morir, a él, a la perfección en persona. Nunca verlo ser feliz, nunca que tuviera tiempo de disfrutar realmente de lo que buscaron toda la serie: ser libres.

Pero Michael tenía ese tumor en la cabeza, iba a morir de todas formas, y eligió sacrificarse por quienes amaba. Y aunque murió quedó todo lo que él dijo, quedó esa sensación de alivio, de dejar de correr, de dejar de esconderse, de poder al fin vivir sus vidas, dejar de ser atormentados por sus demonios, y poder decir simplemente las cosas. Él dijo, que quizá nos pasábamos la vida diciéndonos todo en códigos, en mensajes encriptados, en origami. (no "nosotros", los personaje, pero todo lo que dijo me llegó), y entonces al final podía simple y puramente decirle que los amaba y que finalmente, eran libres.

Perfecto final para la serie. Y sí, lloré a mares con su muerte, pero no creo que haya sido error, creo que supieron cómo ponerle punto final a una historia, algo agridulce, pero no todo puede ser felicidad.

Obviamente hay una serie que tiene su total punto aparte: Lost. <3

Todo el mundo veía Lost en canal 13, yo no o veía. Pero al comenzar la segunda temporada ví un capítulo en AXN, y no sé...caí.

Vi entonces las dos primeras temporadas para entender mejor de qué trataba, y me gustó bastante, pero no fue hasta la tercera temporada que me pegué del todo, por una gran y exclusiva razón: Juliet.

Suelo tomarle cariño a ciertos dañados, con varias caras, con matices, con cosas ocultas y con motivos variados personajes. Quizá por eso siempre odié a Kate, estaba horriblemente mal construida para ser la mujer protagonista de la serie.

Lost es una serie totalmente jalada, de verdad, a veces me pregunto qué clase de alucinógenos ingerían sus guionistas, pero me encantaba, porque era tan re loca, que no podía si no, ahora sí, estar totalmente rendida a sus pies.

Quizá era un paralelo entre la historia general y la historia de Juliet, nunca siendo claro de qué lado estaba, nunca siendo totalmente abierta, así como la serie nunca dejaba claro qué diablos pasaba. Y quizá todo tuvo sentido en la temporada 5.

Los saltos de tiempo fue algo bizarro, el parelelo entre la isla y el resto del mundo fue un descanzo a tanta selva. Y también fue otra cosa: Juliet y Sawyer. Y no, no es que desde ahí solo viera la serie por su relación amorosa del máximo y azucarado modo de ser. De hecho lo que mas me gustó de ellos era lo dañados que eran ambos personajes, lo lejos que querían mantenerse de todos, emocionalmente, y cómo entre sus irónias y el detestarse, encontraron algo que encajó,  y que los actores que los interpretaban fueron capaces de plasmar en un capítulo, donde cuentan su historia. De hecho, en una escena, porque lo demás era incinuaciones. Pero  como siempre mueren los personajes que me gusta, mataron a Juliet, y lloré, y lloré, y aun lloro cada vez que veo cómo cae y al final hace explotar la bomba. También cuando al inicio de la última temporada muere en los brazos de Sawyer, qué crueles son!  Pero también amé el cambio creado en él, el desarrollo que ocurrió de ser un saco de pelotas, a ser un saco de pelotas con sentido común. No hay mejor parte que el tiempo en Dharmaville, ellos dos como personajes llegaron a su equilibrio, aun cuando luego los derrumbaron.

La serie, y su última temporada, fueron a otro nivel, se fueron por lados que uno nunca imaginó al inicio de la serie, pero incluso con sus voladas místicas y algo religiosas si se quiere, Lost tenía aun ese misterio, eso de no necesitar explicar cada cosa que ocurría, y aceptar que dentro de su mundo pasaban cosas simplemente.

El final de Lost fue algo...uhmm, fue como el evento esperado. Tenía esa sensación de ansiedad y esa noche me quedé despierta, esperando que lo subieran y apenas estuvo lo descargué y me puse a mirarlo.

Creo que lloré desde que empezó, sentía que me faltaría algo sin Lost, y sé que es exagerado, pero no puedo evitarlo. Las historias, escritas, filmadas, de forma que sea, parecieran ser el alimento de mi ser, no puedo, como ya dije, despegarme de las historias. Quizá por eso todas me hacen llorar como niñita, quizá solo soy demasiado exagerada.

Cada minuto del final, era como sentir que se iba yendo, mas, y mas. Y esa especie de reencuentro, cuando los personajes "despertaban" en sus vidas del universo alterno, eran demasiada emoción. Obviamente cuando apareció Juliet, cuando ella y Sawyer se reencontraron, fue el momento mas esperado, lo que mas deseé ver, y quizá por eso amé el final, aun cuando muchas personas odiaron cómo terminó Lost, yo orgullosamente le amé.

Estando en la iglesia, cuando Jack despierta, cuando ahí todo adquiere sentido, cuando sabemos que en el final todos están muertos allí, sin importar quién murió en la isla, o en qué orden cronológico. Allí debían reunirse con lo que realmente importaba en sus vidas. Y sí, pueden decir que fue algo demasiado espiritual para el final de Lost, pero yo lo tomo como una metáfora post-mortem. La realidad es que algunos salieron de la isla, y Jack murió. Pero en esta after life, era como un pequeño epílogo, lo ocurrido en la isla, cuando estaba hundiéndose, es quizá la parte científica, lo que ocurría en paralelo, con ellos reencontrándose era la fé. Y Lost siempre fue sobre ciencia versus fé. Man of sciencie, man of faith.

Y entonces llego a la serie que causó que me pusiera a escribir sobre todo esto: House.

Acabo de ver el final, y supongo que debo digerirlo mas, pero no puedo dejar de pensar que cuando una serie termina, enseguida obtienes tu resultado, y no me gustó.

House la veía porque la daban a episodios saltados en tv, daba igual, funciona. Pero quise verla en orden y creo que así fue como me mandé las 6 primeras temporadas, largas temporadas.

Aburre un poco, House era una serie un poco rutinaria, con hilos de fondo que la hacían interesante. Quizá mi temporada favorita es la cuarta, todo el asunto de los nuevos, fue divertido. Pero House es House y nunca cambiaría, nunca terminaría siendo diferente.

El problema de una producción en series, cuando un actor ya no sigue, es que te deja patas arriba todo, y los guionistas deben arreglárselas para hacer funcionar el barco. Lamentablemente la salida de Cuddy jodió bastante la serie y la última temporada fue aburridísima, excepto por algunas escenas, pero realmente ningún capítulo marcó, ni siquiera el final.

Es como cuando todos creíamos, por el trailer del capítulo, que Wilson moriría, y terminó pasando que las escenas mas extremas y crudas de ese capítulo eran las del adelanto, y el resto nada, ni un sobresalto, ninguna emoción mas que eso.

Dejaron demasiado cabos sueltos, o personajes no cerrados, aunque los principales de cierta forma tuvieron su propio final, incluyendo a Cameron, que fue totalmente acierto el traerla de vuelta. Pero no sé, siento que cerraron quizá demasiado apurados a los otros personajes, les dieron poco espacio. Por mucho que House y Wilson sean los principales, los otros también merecían tener un mas dedicado cierre de historias.

Las alucinaciones de House fueron buenas, el cuestionamiento, el pequeño cambio en él para hacer algo por Wilson. Pero el capítulo  a pesar de gustarme como capítulo, no era un final de serie. Quizá porque yo esperaba, y quería profundamente, que House muriera. Sí, soy mala.

Amaba al personaje, pero sentía que ese era su real punto final, porque, como dije, House es House. Le dará los últimos meses a su amigo, pero luego...¿qué? House debió morir.

Pero bueno, es una serie, se me pasará la molestía. En un par de meses. Quizá.

Ahora entonces volvemos al punto donde solo tengo una gran serie encima, porque las demás que veo no es que realmente me desvivan. A menos que contemos True Blood, que las primeras temporadas era genial como historia, pero ahora ya se puso normal y creo que el gran incentivo es ver a Alexander Skarsgard. Oh, dioses del Olimpo que crearon a ese especímen de hombre comestible.

Pero la serie en realidad se está volviendo algo un poco aburrido, de todas formas seguiré viéndola.

La gran serie que me queda es Game of thrones.

Amo las historias épicas, grandes, de guerras, de cosas algo mitológicas y esta serie me robó el corazón desde que comenzaron a anunciarla y esperé meses para su estreno. Y ví cada capítulo feliz, y aterrada y comprendiendo que si solía sufrir porque matan a personajes que adoro, iba a sufrir a diario en esta serie.

Primera temporada y quedé con los nervios destrozados, demasiado en solo 10 capítulos. Matar al protagonista, hacer tantas cosas y tener tantos giros que te marean. La segunda temporada no van tan movida, pero si tiene una historia interesante. Amo esta serie y aunque es poco en capítulos y debo esperar bastante al siguiente, vale la pena.

Y debo prepararme para que el autor de A Son of Ice and Fire siga matando  a los personajes que adoro, lo sé. Y debo ponerme al día con esos libros.

Espero que para cuando termine esta serie, que debería tener 7 temporadas, sea algo espectacular. No puede ser de otra forma, considerando la clase de historia épica que es.

Y solo como dato extra. Iré a ver el final de Lost por ves mil, es necesario.

No, nunca dejaré de estar pegada a las historias, no tengo remedio

=)

domingo, mayo 13, 2012

Fijaciones...obsesiones wannabe

Ok, quizá igual tiene que ver un poco con la obsesión.

Todo el mundo tiene fijación por cosas muy específicas, las mujeres tenemos fijaciones muy específicas, peor si uno anda en modo vanidosa, peor si uno no puede dejar de ser vanidosa!

Hoy estábamos paseando por el Parque Arauco. Me gusta la estructora de ese lugar, es arquitectónicamente el mall mas lindo de Santiago. Por otro lado, cómo odio los malls llenos en fin de semana, pero es obvio, porque todo el mundo sale los sábados en la tarde, mas que el domingo, he notado.

Está esta tienda DBS, que tiene muchos esmaltes, muuuuuuucho. También tiene esta marca de diseño vintage de maquillaje que es ultra linda, ultra cara también, Too Faced. El punto es que entrar a esta tienda, en compañía de mi querida María Contanza....es un peligro.

Fijación por los esmaltes y todas las cositas que sirvan para las uñas. Nunca en mi vida conocí a alguien que tuviera tantos esmaltes y tonteritas lindas. Pero es tan entretenido ir a visitarla y terminar con manicure. Opi tiene realmente colores geniales, pero son muy caros, y los esmaltes es su fijación, no la mía. Aunque debo reconocer que por su influencia ahora tengo una colección de coloridos esmaltes. u.u

Allí, en DBS, había una crema hidratante de Argan Oil, que es la cosa mas maravillosa del mundo, como base para cosas de piel o pelo. De todas formas me da algo de recelo comprar cosas para la piel, gracias a mis estúpidas alergias tengo un poco de paranoia sobre usar cosas que eventualmente puedan hacerme peor.

Entonces, viendo los productos de Argan Oil, me acordé de mi fijación:

Cosas para el pelo.

Había una vez una niña pequeñita llena de rulos, que al crecerle el pelo se le alisó un poco, que se le volvió a ondular cuando al entrar a pre kinder se cortó el pelo por primera vez, que toda su vida ha peleado con su pelo por tener muchos rulos y volumen, y que luego de una larga batalla, llegó a amarlo.

Igual me he hecho tonteras dañinas en el pelo, siendo la peor el alisado permanente, que me duró una semana, pero me quemó bastante. O quizá aquella vez que me cortaron el pelo y me lo dejaron horrible, pero era niña, daba lo mismo.

Cuando me llegó la vanidad andaba siempre peleando con él, pero creo que ha sido estos años que aprendí a tenerle cariño y cuidado a mi pelo alborotado. Aunque hace un par de años me hice mechas cereza, luego vino el drástico cambio de tener el pelo hasta la cintura (cuando andaba natural, no alisado, osea, muuuy largo) y cortármelo casi hasta las orejas. Sigo pensando que era genial tener el pelo corto, pero amo los extremos, o muy corto o muy largo. El proceso de crecimiento es lo peor del mundo, lento además.

Punto aparte. Benditas sean las que les queda el pelo corto, cortito a lo garçon, se ven hermosas. A mi no me queda, me vería horrible. Por otro lado el bob si me quedaría, pero sería una lata estar siempre alisándome, aunque el bob con rulos no se ve mal, es como...tierno.

Entonces, al crecer el pelo me hice las mechas rubias, varias veces, qué loco era verme pseudo rubia, por un tiempo, y por alguna extraña razón, me gustó. Luego lo odié.

Justo por ese tiempo entré al canal, y creo que al primer día en el entreset me puse a conversar con el peluquero, que es la cosa mas amorosa del mundo. Y me regaló un ondulador, que está muriendo de tanto uso. Pero no ha sido solo ese regalo lo que me ha quedado de las eternas conversaciones sobre pelo.

Ya desde antes tenía cosas, cremas para peinar, crema de tratamiento, blah. Pero de pronto noté que tenía demasiadas cosas. Pero tanto tontear con el pelo uno debe cuidarlo! Obvio que para usar plancha, ondulador, y secador (que los odio, pero debí comprarme uno antes de morir resfriada por salir con el pelo mojado en pleno invierno), es necesario usar protector de calor, así no se quema tanto. Y las puntas partidas necesitan serum, aunque no sé si dos tipos distintos. Y para la noche! tratamiento nocturno de cuidado del cabello. Y tantas otras cosas, incluyendo el shampoo de Argan Oil que compré en el staff de BellezaySalud SyB de la feria taconeras, cuando me gané las entradas para ir a ver zapatos hermosos e inalcanzables. Ese shampoo es maravilloso, pero lo uso de vez en cuando, porque me salió caro, y yo no soy la clase de persona que compra tonteras caras, así que cuando lo hago, las hago rendir.

Bendito Argan Oil!

Creo que fue por esas fechas que me puse las extensiones que tenían en peluquería, las de la Adela parece, y amé el color, así que poco después tenía mi pelito chocolate. Y mi peluquero como siempre amoroso, (aunque irónico al extremo, a veces me pregunto si será sagitario) me dijo que dejara de tontear con mi pelo y dejara mis lindos rulos ser. Y al fin, cuando comenzó el calor de nuevo y pude dejar el secador, mis rulos y yo con ellos, hemos sido felices.

Para el verano de todas formas, casi seis meses después de teñirme, tenía un curioso degradez, de mi color natural, el chocolate, y hacia las puntas mis antiguas mechas rubias asomándomse. El problema de haber decolorado para eso u.u Pero ahora ya están yéndose, y mi chocolate anda completo, aunque algo rojizo, que se ve lindo de todas formas. Cualquier cosa rojiza siempre será hermosa.

Excepto una quemadura, dolor.

 Pienso que ha demorado demasiado en crecer, quiero tenerlo larguísimo de nuevo, y apenas anda cerca de la cintura. Y sé perfectamente que tendré el pelo largo un tiempo y luego lo sacrificaré, para volver a tenerlo ultra corto, sí, soy mala. Aunque creo que hay solo una persona en el mundo que le gusta mi pelo corto, todo el resto desea matarme cuando insinúo cortarlo.


No sé tampoco cual es el asunto con el pelo tan largo, si suele interrumpir buenos momentos en la vida, cuando se mete en medio.

De todas formas largo es entretenido para peinarse, hacerse trenzas raras (que es probablemente mi único y gran talento en la vida), usarlo de abrigo cuando hace frío y no sabes con qué taparte el cuello. Y tantos usos útiles que termina teniendo el pobre pelo.

Pero al fin llego al punto donde soy una persona feliz de mis rulos, el pelo liso es bastante aburrido, solo a veces está bien pero...bah!

Qué curioso es como pasas por etapas donde aprendes a querer y cuidar los pequeños detalles de ti misma. Y por eso mismo, hay que seguir cuidando el pelo con todas las tonteras que tengo ahí para ponerle.







Mi pobre webcam..... u.u
Y eso que es solo lo de un año.

domingo, abril 01, 2012

Deslumbres en la calle

Generalmente cuando estoy camino a alguna parte, ya sea caminando o en micro, o incluso metro - que poco uso- me distraigo mirando alrededor, los detalles, las personas. Curiosamente si anda cerca alguien conocido probablemente no lo vea, estoy con la atención perdida en la luna.

No me agrada mucho cuando se suben a tocar en las micros, porque casi siempre es música que no me gusta, casi siempre se ubican al lado mío, y yo no puedo subirle mas el volumen a mi MP3 para poder seguir en mi música, obvio, porque esa sí me gusta.

Una vez se subieron dos chicos de mi edad con guitarras, y pensé que quizá tocarían algo que me daría lata escuchar, pero entonces comenzar a cantar canciones de The Beatles, haciendo un dúo perfecto para mezclar sus voces y sonar como McCartney y Lennon. ¡Eran maravillosos! Y me quedé pegada escuchándolos, cantando "Love me do" con ellos, y, por supuesto, dándoles moneditas por hacerme pasar el mas agradable viaje en micro que había tenido.

He tenido otro mejores, pero nada tienen que ver con músicos que suben a tocar. Ok, no hablaré de eso u.u

Punto aparte. Amo a The Beatles, pero creo que está sobrevalorados y elevados a nivel de dioses y que muchas personas solo dicen amarlos por moda. Me carga. Queen sigue siendo musicalmente mucho mas grande que The Beatles de todas formas. Y sí, pueden lincharme por eso =)

Volviendo al asunto de la calle. Me gusta mirar a las personas que se sientan pacientemente con sus objetos hechos por ellos mismos, a venderlos. Siempre me llama la atención esas figuras de alambre, o cualquier cosa colorida hecha a mano. Los dioses saben cómo duele hacer cosas a mano, literalmente.

Y semaforear, ese nuevo verbo salido de pararse en una esquina mientras los autos están detenidos y ofrecer un show de habilidades para luego pedir moneditas. Qué prostituyente (estoy segura que esa palabra no existe) suena eso de irse a una esquina, quizá de algo así viene. Pero mostrar habilidades físicas, relativamente peligrosas, sobre el cemento es aun mas peligroso.

Hoy iba caminando desde el depa a donde una de mis amigas. Apróximadamente una hora el viaje. Y sabía que vería cosas por el camino, Plaza Italia y Pío Nono suele tener cosas llamativas los domingos. Pero hoy quedé impresionada cuando al cruzar por Av SantaMaría vi a una pareja haciendo ballet. Me quedé pegada como idiota mirándolos. Debió doler hacer giros en punta sobre el cemento, de hecho luego vi a la chica cambiarse los parches de los dedos. Oh, bendito dolor haciendo cosas que adoras.

Amo el ballet, es como el pequeño rincón de fantasías infantiles. Porque hay otras cosas que partieron como fantasías infantiles en mi vida, pero derivaron en cosas muy poco relacionadas con la infancia. Pero el ballet es como algo por lo que chillo y pongo naturalmente mi mejor puppy face. Desde el primer instante que tuve las entradas del Cascanueces en mis manos, desde que entré al Teatro Municipal a verlo el día del estreno -el día de mi cumpleaños- fue como entrar a un cuento de hadas. Ver sus manejos de luces, su escenografía cambiante en pleno show, sus movimientos, su música. Creo que si no fuera porque ir allí es caro, me lo pasaría metida en el Municipal.

Quizá la ópera no me deslumbra tanto, debe ser por el desplante escénico queel ballet tiene, y la ópera no es tan asi. Aunque no me quejo de verla, también la adoro.

El asunto es que nunca vi antes a bailarines de ballet en la calle, lo encontré genial, porque era traer hacia la calle, acercar algo que suele ser tan de elite, hacia todos. Verlos en sus trajes y sus puntas hizo sentir esa cálida sensación de cercanía a la fantasía. Y ellos tomándose fotos con la gente también. Allí fue cuando noté cuanto la gente desea ver mas de eso, y lo maravillo que sería que las entradas costaran menos, porque aun cuando la presentan en la plaza a veces en navidad, la magia de estar dentro de lo hermoso que es el Teatro Municipal, es otra experiencia.

Y hoy, una vez más, amé salír a caminar escuchando música. Aunque ahora me duelen las piernas, lo que da igual después de haber visto el ballet en el semáforo.

viernes, febrero 24, 2012

Que se queda...

Habrán quizá palabras al viento
Quizá susurros sobre mi piel
Como fantasías que en un tiempo creímos.
Fantasías de las que nunca me olvidaré

Te lo dije, te lo dije tanta veces...

miércoles, febrero 15, 2012

A mis pies

No sabría decir cuando exactamente comenzó. Quizá por una persona que me mostraba unos zapatos hermosos que adoré, quizá porque de pronto me cayó encima el ser bajita.

Tengo una debilidad por las cosas hermosas, me encanta mirarlo todo, me encanta encontrarle los detalles y de pronto me veía vitrineando zapatos, no ropa, porque nunca miro ropa, pero allí andaba, buscando mi número y subiéndome unos centímetros mas arriba.

Entonces me dió el momento impulsivo y me compré un par. No puedo creer en este momento que la primera vez que salí con ellos pensé que moriría de dolor o me caería de trompa al suelo. ¡Pero eran tan bonitos! Como dije el día que los vi, zapatos de mina top de Miami.


Pero 7 cm no es tan terrible con costumbre, a lo que aun no logro adaptarme es a los botines taco delgado de 10 cm, esos si que son, como me gusta llamarlos, feetkillers. Ahora al menos me he medido y con los que he comprado/regalado/heredado, me acostumbro. Sin mencinar que mis sandalias floreadas están re gastadas.



Lo curioso de ponerse tacones es que uno camina diferente, como que el hecho de que tu postura cambie, también te da un impulso diferente al caminar. Quizá tornarse en la actitud de ser segura porque ves todo desde otra altura....jajaja.

Y ahora me lo paso viendo fotos y sigo probándome zapatos.



Pero no me ha agarrado el síndrome Carrie Bradshaw, porque no me gasto lo que no tengo, tampoco tengo 400 pares de zapatos, tampoco tengo de diseñador. ¡Ni loca! ¡No tengo plata!

Y no es solo los altos, si no que también me rayo con las ballerinas, y las hawaianas! Especialmente ahora que hace calor. Dioses, cómo demoré en encontrar un par de hawaianas de vestir, simples, lindas y baratas.





Curiosamente, a pesar de mi gusto por los zapatos, disfruto mas que nada en la vida de caminar descalza...lo que provoca que ande todo el día lavándome los pies. u.u


miércoles, febrero 01, 2012

Back

Uno nunca se da cuenta lo que tiene hasta que lo pierde....blah blah blah.

Cierto...pero también hay otra cosa:

Que uno sabe realmente lo que tuvo si es que esa persona se pierde definitivamente de tu vida por inmadurez, o regresa, porque ambas partes han sabido que el orgullo no sirve sobre el cariño.

=)


PD: Siento que quisiera hablar mas de esto, pero no ahora...quizá después siga.