Amo como rebuscas con tus dedos entre mi cabello
como lo desordenas cuando lo he acomodado recien luego de la ducha
como relajas mis tensiones asi de simple, asi de certero.
Adoro descobijar mis emociones de noche cuando sé que te tengo para reconfortarme
Y que cada palabra se vuelva fácil de pronunciar, siendo que siempre han sido solo fáciles de escribir.
Me gusta despertar desorientada, acostada al revés en la cama, y abrir los ojos encontrándote a mi lado.
Durmiendo como un niñito, acurrucado tan extrañamente.
Es gracioso ver tus mañas, tus costumbres, tu habilidad para hacerme reir a carcajadas después de tanta tension.
Incluso puedo imaginar tu cara, y tu reacción sabiendo esto, ok, ya lo sabes, pero puedo verla.
Enterneciendote con todo, sabiendo cuanto suele extralimitarse la descarada confianza.
Y sobretodo, adoro tus abrazos. Y amo no extrañarlos desesperadamente, sino atesorarlos, entenderlos y transformarlos en todo lo que viene de ti.
jueves, noviembre 05, 2009
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